El Thistlegorm es quizá el pecio más famoso del mundo, sólo tuvo un año de vida y su fama le ha llegado en el fondo del mar, la verdad que bucearlo recorriendo sus bodegas cargadas de armamento y repuestos militares es una experiencia impresionante aunque a veces se nos escapa que las burbujas de aire producidas por los buceadores también erosionan y ayudan al deterioro.
Es cierto que mucho del daño viene provocado por la extraña manera de amarrarse al propio pecio que tienen los cruceros y barcos que lo visitan, es por ello que se creó una plataforma y proyecto de conservación "Saving the Thistlegorm".
Este pecio recibe miles y miles de buzos cada mes con el consiguiente desgaste; además todavía hay quién aprovecha para robar y desmantelar partes de su interior, restos que se llevan como souvenir.
Es cierto que mucho del daño viene provocado por la extraña manera de amarrarse al propio pecio que tienen los cruceros y barcos que lo visitan, es por ello que se creó una plataforma y proyecto de conservación "Saving the Thistlegorm".
Este pecio recibe miles y miles de buzos cada mes con el consiguiente desgaste; además todavía hay quién aprovecha para robar y desmantelar partes de su interior, restos que se llevan como souvenir.
Las dos inmersiones que hicimos aquí me supieron a muy poco, esa fué la tónica de todo el viaje; me quedé con ganas de más en cada pecio.
En la primera visitamos el interior, no conseguí buenas fotos aunque gocé de lo lindo recorriendo los compartimentos oscuros y viendo alas de avión, rifles, motos, vehículos y demás repuestos iluminarse a nuestro paso.
En la segunda inmersión rodeamos parte del buque y los restos cercanos, este punto de buceo suele tener corriente, hay que resguardarse de ella si uno quiere hacer fotos.
Fué aquí dónde conocí un dato que ayudó a mitigar mi frustración fotográfica, los cruceros de Fotosub en algunos casos llegan a hacer 11 inmersiones en el pecio; lo cuál amplía bastante la posibilidad de conseguir buenas tomas.
Fué aquí dónde conocí un dato que ayudó a mitigar mi frustración fotográfica, los cruceros de Fotosub en algunos casos llegan a hacer 11 inmersiones en el pecio; lo cuál amplía bastante la posibilidad de conseguir buenas tomas.